I Lunes,
10:07 AM. Aula de plástica; Instituto. Estoy sentado en un pupitre tras unas
grandes mesas blancas adornadas por debajo con chicles pegados de varios
sabores y texturas. Estoy aburrido, siempre me pasa cuando mandan “dibujo libre”.
Mis compañeros, abalanzados sobre sus Din-A3 con los lápices a todo trapo; yo
apenas he sacado punta y estoy adormilado observando la puerta. De repente, se abre. Nuestro tutor Toni, entra con
una chica detrás de él:
—Chicos, os presento a Eli, vuestra nueva compañera, tratarla bien.
—Chicos, os presento a Eli, vuestra nueva compañera, tratarla bien.